Durante la Guerra Civil Española, la Aviación nacional recibió una pequeña cantidad de Heinkels 112B-0. Llegaron en las postrimerías del conflicto teniendo una participación muy pequeña. Tan sólo se acreditó el derribo de un avión republicano.
Posteriormente al conflicto fueron destinados al norte de África, donde recibieron un vistoso esquema de camuflaje.